Es un buen momento para la reflexión, tanto personal como profesional.

Hoy entrevisto a Jose Manuel Fernández, Director de Diseño de Interiores de LaGranja, coordinar y profesor en el IED Barcelona y profesor en LCI Barcelona y alguien al que admiro profundamente por su humildad y generosidad compartiendo tanta información y conocimiento adquirido a lo largo de su trayectoria profesional. Jose Manuel trabaja en LaGranja desde el año 2004 y ha sido uno de los protagonistas de una gran masterclass en streaming que compartiré en breve con todos vosotros a través de mi canal de youtube.Mientras tanto os comparto esta entrevista con el con el objetivo de seguir ayudando a que este sector sea un gran conocido para todos.

Lagranja Design es un estudio de diseño multidisciplinar, fundado en 2002 en Barcelona por Gabriele Schiavon y Gerard Sanmartí, que se especializa en la creación de interiores, productos e instalaciones efímeras. 

El nombre del estudio procede del nombre de la calle en la que lo abrieron, que se llamaba ‘Carrer de Lagranja'. Los encargos de Lagranja Design incluyen el diseño industrial para empresas, instalaciones para instituciones culturales, la rehabilitación de edificios y proyectos de 'retail' y de hostelería. Además cuenta con su propia editora de mobiliario, Lagranja  Collection, formado por una serie de sillas, taburetes, sillones y mesas hechas con materiales nobles y tejidos seleccionados.

En 2010, Lagranja Design consolidó su crecimiento ampliando su actividad con una nueva oficina en Hong Kong y luego en Estambul. Poco después, a principios de 2011, el estudio se trasladó a un nuevo espacio en una fábrica de galletas modernista en Barcelona. En la actualidad el estudio está formado por un equipo de más de 15 personas. Lagranja Design ha ganado prestigiosos premios nacionales e internacionales como el Red Dot Award (2007), Premi Ciutat de Barcelona de Disseny (2008), Premio Via (2009), IIDA Excellence Award from the Internationa Interior Design Association-USA (2009), IDEA Award (2008) y el Delta de Plata (2012).

En vuestro caso, al viajar fuera de España, ¿Preveíais esta situación actual de alguna manera? 

Creo que una situación como esta es muy difícil de poder prever. Estábamos informados de como se estaba gestionando la situación en Singapore (dónde actualmente tenemos oficina), pero la verdad es que como a casi todo el mundo nos parecía que era algo que no nos afectaría de la manera en la que nos vemos inmersos actualmente.

Tenéis presencia en Barcelona, Estambul y Singapur, ¿Cómo os ha afectado esta situación actual a nivel de negocio con respecto a otros países?¿Os ha afectado? 

 La situación global, aunque con pequeñas diferencias, es similar. Vivimos un periodo de incertidumbre y eso siempre afecta a la capacidad de movimiento e inversión de las empresas. Algunos de los proyectos internacionales siguen en activo, especialmente los que son de largo recorrido y todavía están en una fase de diseño, pero somos conscientes que en los próximos meses el ritmo de trabajo se verá afectado por esta situación y sobre todo será más difícil conseguir nuevos proyectos. 

¿Cuántos proyectos tenías en marcha cuándo saltó la alarma del COVID-19 España? 

Actualmente estamos trabajando en 3 hoteles en diferentes países (Tailandia, Dubai y Tanzania), un proyecto residencial en Malasya, un par de proyectos de F&B en Turkía, dos proyectos en Gibraltar, un proyecto en París y otro en Roma. En Barcelona-Cataluña estamos trabajando en 4 ó 5 proyectos muy interesantes. 

 

¿Cómo habéis vivido las primeras noticias sobre las medidas a adoptar en la España? ¿Y en Turquía? ¿O en Singapur?¿Ha sido muy diferente en cada país? 

En España, creo que como el resto del mundo y compañeros de profesión, con cierta preocupación pero intentando siempre priorizar el componente humano del equipo. Unos días antes de que se decretase el estado de alarma ya intuíamos que la situación era grave y que el confinamiento se presentaba como algo inevitable por lo tanto nos pusimos en marcha para intentar organizar todo el equipo para poder teletrabajar. De Turkia no tenemos demasiada información de cómo se ha ido gestionando la crisis. Sí que algo más de Singapore, que afortunadamente ya está empezando a normalizar su situación. Conocemos bien la sociedad singapurense y sabemos que son extremadamente disciplinados y organizados por lo tanto creo que les ha resultado más fácil gestionar esta crisis. También es un país muy pequeño y muy acotado con lo cual entiendo que eso también ayuda. 

 

¿Cómo os habéis adaptado a esta nueva situación? Vosotros imagino que estabais preparados para trabajar desde la distancia. ¿Cómo ha sido esta situación en vuestro caso?

Yo personalmente sí que tengo bastante experiencia en el teletrabajo ya que he tenido que pasar varias temporadas en diferentes países para supervisar los trabajos de algunos de nuestros proyectos internacionales. Eso nos ha dado un poco de ventaja ya que parte del estudio ya estaba acostumbrado y nos ha resultado menos complicado poder organizar al resto del equipo. Actualmente creo que el estudio está funcionando a la perfección.

Salvo el componente humano podríamos decir que el resto de componentes del trabajo no se están viendo muy afectados.

 

 

La verdad es que es complicado dar consejos en momentos como éste y que no suenen a mensajes vacíos o que ya hayamos escuchado hasta la saciedad. Creo que en cualquier caso es un buen momento para la reflexión, tanto personal como profesionalmente. Un momento para aprender a valorar más las cosas que tenemos más cerca y esto es también aplicable a nuestra profesión.

En el mundo del interiorismo especialmente en el mercado destinado al retail, hospitality o f&b a veces nos vemos inmersos en una vorágine intentado buscar el resultado más efectista posible y a veces esto no nos permite fijarnos en las cosas que tenemos más cerca y que aún siendo más sencillas nos pueden proporcionar la misma satisfacción estética que los grandes gestos que suponen inversiones desorbitadas.

Como en cada época de crisis la creatividad, el ingenio y la sensibilidad será la única manera de superar esta situación. 

Creo que otro punto que tenemos que tener muy en cuenta es que sigamos manteniendo la ética y el respeto hacia la profesión. Durante la crisis del 2008 se vieron actitudes en algunas empresas implicadas en el sector de diseño que no le hacen nada bien al resto del gremio y al futuro de la profesión. 

 ¿En la actualidad, cómo lo estáis viviendo? 

Pues estamos todos trabajando desde casa, intentado mantener los plazos de los proyectos que tenemos en marcha y que no se ven afectados por esta crisis. Por otro lado también estamos aprovechando para realizar un trabajo de mejora en aquellos elementos que después nos permitirán ser más eficaces (sistemas de dibujo, base de datos, coordinación de equipo, etc…).

Por otro lado también estamos haciendo un trabajo de auditoría interna para poder entender como nos puede afectar esta crisis a nivel económico en corto-medio plazo para intentar tomar las medidas que eviten tener que prescindir de ningún componente del equipo.

¿Cómo crees que afectará esta situación al sector del interiorismo y la arquitectura en general? 

 Entiendo que como en el resto de sectores nos veremos afectados por una recesión y un período de incertidumbre. Pasaremos por una etapa donde se reducirán las inversiones de las empresas y esto siempre afecta al sector del interiorismo. 

Por otro lado, creo que esta crisis nos está obligando a innovar en el uso de muchas tecnologías y en la búsqueda de nuevos nichos de trabajo que estoy seguro de que muchos de ellos se incorporarán sin solución de continuidad al desarrollo de nuestra profesión.

 

Y para terminar nos encantaría conocer cómo se vive en interiorismo o la arquitectura fuera de España? ¿Es muy diferente?

La verdad es que a nivel personal ha sido una experiencia muy gratificante por varias razones. En primer lugar normalmente cuando alguien te llama para poder hacer un proyecto a muchos kilómetros de distancia es porque le interesa lo que haces, por lo tanto suele resultar más fácil poder hacer un proyecto interesante. Esto en general, te hace sentirte más valorado.Por otro lado,  el componente humano es muy importante. Aprender a escuchar, saber qué significa cada gesto en cada cultura, saber qué técnicas de construcción se utilizan, etc…Recuerdo siempre con cariño como durante una época supervisando un proyecto en China me conseguía entender perfectamente con el jefe de obra simplemente dibujando con un lápiz en la pared.